El Servicio de Seguridad Alimentaria y Sanidad Ambiental de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Aragón ha puesto en marcha un nuevo trámite digital que permite simplificar la solicitud de la autorización e inscripción de los establecimientos alimentarios en el Registro Sanitario. Es uno de los seis proyectos elegidos este año por Servicios Digitales de Aragón (SDA), dentro de la convocatoria ‘Rediseño de servicios públicos 2024’.
SDA es el área del Gobierno de Aragón que trabaja para mejorar la experiencia de las personas cuando usan los servicios públicos mediante las tecnologías y el diseño. Depende de la Dirección General de Administración Electrónica y Aplicaciones Corporativas, del Departamento de Hacienda y Administración Pública.
Este nuevo servicio digital permite la inscripción inicial, modificación de datos o baja en el Registro Sanitario de Aragón de los establecimientos alimentarios que operan en la Comunidad Autónoma. “Se trata de una gestión que puede resultar ardua para los ciudadanos”, han apuntado desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Sanidad Ambiental.
El perfil de las personas que acuden al servicio es muy variado. Por lo general, las empresas o negocios tienen conocimientos y formación suficiente. Sin embargo, en bastantes casos, se trata de personas con dificultades para entender el lenguaje administrativo, personas mayores o extranjeros con dificultades con el idioma.
Esto ocurre en establecimientos de comercio al por menor, como bares y restaurantes, fruterías, panaderías o carnicerías, entre otras, incluidos aquellos especializados en productos o comida de otros países. Se trata de un gran número de empresas, con mucha rotación, altas y bajas.
Por otra parte, esta tramitación afecta a todo el territorio de Aragón, con lo cual la digitalización facilita las gestiones enormemente. El impacto es de alrededor de 3.000 expedientes al año, con un alto porcentaje de negocios de comercio al por menor.
REDISEÑO
Desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Sanidad Ambiental han comentado que, hasta ahora, se venía trabajando en la digitalización de los trámites mediante el tramitador online disponible en la web www.aragon.es. No obstante, puesto que el trámite puede resultar bastante complejo, dado el número de opciones disponibles, ya se estaba preparando su simplificación.
Por eso, se consideró de interés la opción de disponer de una ayuda externa. Con esta finalidad, se presentó una propuesta a la convocatoria ‘Rediseño de servicios públicos 2024’ y fue una de las seis seleccionadas para todo el Gobierno de Aragón “por su impacto, replicabilidad y relevancia”.
El objetivo ha sido analizar el servicio con el fin de mejorarlo. Para eso, se han estudiado todos los aspectos posibles de forma que se facilite el trámite al ciudadano y le resulte “más amigable”, al tiempo que se reduzcan los errores en la gestión y aumente la eficiencia administrativa.
Con esta finalidad, se han llevado a cabo reuniones de trabajo “para revisar concienzudamente el proceso y ver cuáles son las oportunidades de mejora, las opciones aplicables y finalmente llevarlas a cabo”, han apuntado desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Sanidad Ambiental. También se han llevado a cabo encuestas de satisfacción para identificar la calidad y los aspectos de mejora.
Además, se ha revisado el lenguaje, la presentación en los formularios y la información en la web “para hacerlos más comprensibles, amigables y útiles al ciudadano”. Internamente, se han revisado los procedimientos para hacerlos más rápidos y eficientes.
BUENOS RESULTADOS
Los trabajos han durado unos nueve meses y las mejoras se han implantado este mes de noviembre. Han consistido en la puesta en marcha de los TTO (tramitadores online) y las páginas web actualizadas. Esto supone que ya no es necesario presentar documentación escrita, ni la presentación física. Asimismo, se ha elaborado una cartelería para soporte impreso y digital para su distribución.
Desde el Servicio de Seguridad Alimentaria y Sanidad Ambiental han subrayado que ya se aprecian los buenos resultados puesto que se han reducido los errores en las inscripciones en el Registro Sanitario, que hasta ahora ocurrían por interpretaciones incorrectas, y también están observando una reducción de los expedientes en los que falta documentación.