La Comarca del Maestrazgo ha reforzado su inversión en restauración

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Desde 2019 hasta 2022 el Área de Patrimonio Cultural de la Comarca del Maestrazgo ha realizado diecisiete intervenciones y ha trabajado intensamente en recuperar, poner en valor y difundir el Patrimonio Cultural del Maestrazgo.

Las restauraciones han sido encomendadas a la Fundación Santa María de Albarracín a través de un convenio de colaboración en el que se ha actuado principalmente en bienes inmuebles. También la restauradora Nieves Guillén ha realizado intervenciones en bienes muebles.

Se ha intervenido en una selección de piezas e inmuebles de gran valor artístico y malas condiciones de conservación. Se han aplicado los más modernos criterios de intervención, devolviendo a las obras su aspecto original, pero respetando su historia, usando materiales compatibles con los usados inicialmente y señalando la reintegración de lagunas para evitar falsos históricos. Todas las intervenciones han sido exhaustivamente documentadas.

Los proyectos han llegado en estos cuatro años a la mayoría de los municipios de la comarca procurando lograr el equilibrio en la distribución de los fondos. Se ha actuado en bienes de propiedad pública y en algunos de la Diócesis de Teruel a la que pertenecen las parroquias y ermitas de la comarca.

Las intervenciones han permitido consolidar partes de inmuebles en riesgo de ruina como los yesos de la portada que unía la iglesia y el claustro del convento servita de Las Cuevas de Cañart. Ha garantizado la conservación de pinturas murales, como las de la ermita de la Purísima de Villarroya de los Pinares, en un deplorable estado o las grisallas de la ermita del Calvario de Bordón que habían perdido parte de su policromía, lo que impedía hacer una lectura correcta de alguna de las escenas. También se ha devuelto la integridad visual a la lonja del hospital de La Cañada de Benatanduz eliminando añadidos que afeaban el conjunto de la plaza. Se ha actuado sobre papel, como los mapas de las antigua escuelas o el biombo de la Casa Aliaga; y en escultura policromada, como la Virgen Inmaculada de Tronchón o el San Antonio de Montoro de Mezquita. También en textiles como el palio y las casullas de La Cuba.

En definitiva, en gran variedad de obras y materiales diversos que se han logrado rescatar del abandono y rentabilizar como recurso cultural. Por otro lado, se ha contado con la aportación de los ayuntamientos que, en numerosas ocasiones, han participado económicamente o favoreciendo la logística, permitiendo llegar a actuaciones más ambiciosas de lo previsto a partir del presupuesto de la comarca.