El Gobierno de Aragón trabaja en una estrategia para reestructurar la Formación Profesional en esta comunidad, que incluirá la creación a corto plazo de 1.500 nuevas plazas y la implantación de una veintena de nuevos ciclos formativos o cursos de especialización. Así lo ha asegurado la consejera de Educación, Ciencia y Universidades del Gobierno de Aragón, Claudia Pérez Forniés, en su comparecencia en el pleno de las Cortes.
La nueva planificación tiene en cuenta las necesidades del tejido empresarial, de la vinculación al territorio y de la demanda de las distintas enseñanzas. De las nuevas plazas, su departamento estima que en torno al 10% estarán ligadas a la digitalización para dar respuesta a la llegada de nuevas inversiones a la comunidad. Además, el Consejo Aragonés de la FP, en el que están representadas las organizaciones empresariales y sindicales, va a impulsar el VI Plan Aragonés de la FP con las líneas estratégicas hasta 2028.
Todo ello, en el objetivo de legislatura -según Pérez Forniés- de “desarrollar, modernizar, difundir y mejorar a todos los niveles” la Formación Profesional, que con 26.500 estudiantes este curso es “más que una etapa educativa” por cuanto tiene de “impulso al territorio y al crecimiento económico de la comunidad”. Con esa finalidad, este curso el presupuesto es un 9% mayor, hasta superar los 236,3 millones de euros.
Uno de los principales retos, tal y como ha explicado la consejera, es el impulso a la FP dual, como “mejor forma de crear talento y retenerlo”. Con más de 500 alumnos, 41 ciclos y 245 empresas involucradas este curso, se persigue dar un paso más allá y seguir aumentando la oferta a corto plazo, ya que supone apenas el 2,2% de la oferta total frente al 4% de la media en España.
Para ello, pretende establecer colaboraciones con las Cámaras de Comercio y otras instituciones y agentes sociales para favorecer el acceso de las pymes a esta formación y buscar un mayor número de empresas que puedan participar en esta formación ad hoc.
También está previsto potenciar la FP online para adecuarse a las transformaciones que está sufriendo el mercado laboral y el sistema productivo. Este curso, son ya más de 3.400 los alumnos (un 6% más que el anterior) los que optan por esta modalidad virtual para poder mejorar su cualificación mientras trabajan.
En el marco de la transformación digital de la FP, este curso está previsto habilitar diez nuevas aulas de tecnología aplicada en centros sostenidos con fondos públicos, con lo que serán ya 35 las disponibles. Estos espacios son clave para el desarrollo de habilidades tecnológicas y potencian un aprendizaje activo y colaborativo, tal y como ha destacado la titular de Educación.
Otra de las líneas de actuación en la que ha incidido la consejera es la mejora de la orientación profesional para que seguir “desestigmatizando” la FP como la formación “moderna, técnica y con altísimas tasas de ocupación” que es.
Durante su comparecencia, la consejera ha avanzado además que su departamento está ultimando el decreto que recogerá toda la normativa de implantación de la nueva ley de ordenación e integración de la FP. Trabaja también en la nueva orden de admisión de los ciclos de grado básico, medio superior y los cursos de especialización.
Eliminación de tasas
Como novedad, su cartera va a implantar –atendiendo a una reivindicación histórica- un sistema centralizado que tenga en cuenta el expediente académico del solicitante, con independencia del centro docente y del ciclo formativo o curso de especialización que se desee cursar.
Por último, la consejera ha explicado que el objetivo del departamento es acreditar este año 2024 unas 10.000 unidades de competencia para aquellos profesionales que tengan competencias adquiridas, por su experiencia laboral o formación informal, pero no certificadas. Para ello ha anunciado que suprimirá las tasas.