La Iglesuela de Cid es punto clave en el paso de la trashumancia que se dirige desde el Maestrazgo de Teruel hacia las costas de Castellón y Tarragona. El ganado de Gonzalo, de la Masía Altaba de Cantavieja, ha atravesado las calles del municipio que forman parte de la vereda o vía pecuaria que se dirige hacia la costa.
En torno a 500 ovejas han discurrido por la calle Chiquica y la calle San Pablo en dirección hacia la localidad castellonense de Villafranca del Cid. Los pastores y los perros conducen a las ovejas hasta la localidad de San Rafael del Río. El paso del ganado, como ocurre por esta época del año, ha llamado la atención de los vecinos y los visitantes. En la próxima primavera se repetirá el camino, pero a la inversa. Los pastores y los perros conducirán al ganado desde el Baix Maestrat de Castellón hasta las montañas turolenses.