La V edición del Festival contra la Despoblación en Allepuz consolida el evento en el calendario aragonés como festival reivindicativo acompañado de una programación de gran calidad artística y musical

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Este pasado fin de semana ha tenido lugar en Allepuz, Teruel, el V Festival contra la Despoblación. Según la organización, Asociación Cultural Escurzón de Allepuz, esta edición se ha apostado fuerte con la programación y el balance ha sido totalmente positivo en afluencia, estimando unos 1500 asistentes a lo largo del fin de semana (en una localidad de 126 personas censadas). También éxito en la participación, reivindicación, organización y apoyo de los vecinos en la ejecución del festival, de imposible realización si no hubiera sido por el trabajo conjunto e incondicional de ellos y ellas. 

Como una de las novedades, comenzó el viernes 20 de octubre, con la actuación de Ixeya (Santa Eulalia) en Cantavieja, queriendo con ello la organización cumplir con la función social con la que fue reconocida con el XI Premio Maestrazgo Europa al mérito social en 2022, ofreciendo una actuación abierta al público en la plaza de la capital comarcal a la que se invitó a las personas del centro ATADI y a los abuelos y abuelas de la residencia de ancianos. 

Por la tarde, el programa radiofónico de éxito nacional, Carne Cruda (Madrid), ofreció un especial en directo bajo el nombre “Teruel Existe. Teruel Resiste”. Con un sentimiento de apoyo y hermandad hacia el pueblo de Allepuz, Javier Gallego y Violeta Muñoz, conductores del programa, entrevistaron a representantes de plataformas en defensa del patrimonio natural y rural como Cantabria no se Vende, representada por Diegu San Gabriel (San Roque de Riomera) y la Plataforma en defensa de los Paisajes de Teruel, con Javier Oquendo (Castellote) como portavoz. También tuvo lugar al comienzo del programa una entrañable entrevista con uno de los organizadores y cofundador del festival, Ignacio Martínez Mallén (Allepuz). El completo show radiofónico también contó con la participación de Pilar Edo (Bañón), de Ganaderas en Red, el coordinador de Agujama, Jorge Abril (Alcañiz) y artistas del mundo rural; Vega Latorre (Monreal del Campo),  poetisa, Elisa Gómez (Aliaga), ilustradora y muralista y el dúo musical Ixeya, que a parte de ser entrevistadas acompañaron el programa con su música, dejando al público boquiabierto y profundamente emocionado con su calidad vocal y musical. 

La jornada del sábado comenzó con la habitual mesa redonda, llena de experiencias enriquecedoras y demandas para combatir la despoblación. Chema López Juderías (Teruel) se encargó un año más de moderar y conducir las ponencias de MAR (Mujeres Artistas Rurales), con Marta Gimeno (Grañén) y Malia Pérez (Oliete) como representantes, Begoña Sierra (Moscardón), en nombre de Asociación de Empresarios Turísticos de la Sierra de Albarracín, nuevamente Diegu San Gabriel, con muchas ganas de compartir e intercambiar ideas entre las comunidades cántabra y aragonesa. Antonio Guillén, vecino de Allepuz y cofundador de Construcciones Allepuz, empresa de larga trayectoria en la albañilería, emocionó a los asistentes con su ponencia, centrada en su oficio como albañil en territorio rural y su visión sobre la vivienda, pero en la que destacó su arraigo al pueblo, concluyendo su discurso citando una canción del grupo aragonés Amaral: “Sin mi pueblo, mi familia y mis amigos yo no soy nada”. A la mesa asistieron, invitación del Ayuntamiento de Allepuz mediante, Herminio Sancho (Diputado en el Congreso), Beatriz Martin (Vice Presidenta Primera de la Diputación Provincial de Teruel), Pedro Polo (Portavoz DPT), Benito Ros (Delegado Territorial DGA en Teruel), Tomás Guitarte (Portavoz Teruel Existe en las Cortes de Aragón), Fernando Safont (Presidente Comarca del Maestrazgo), Roberto Rabaza (Vicepresidente Comarca Maestrazgo) y Mari Carmen Soler (Presidenta del Parque Cultural del Maestrazgo). Desde la organización se instó a los asistentes políticos a realizar una escucha activa en la mesa redonda y trasladar las ideas y soluciones expuestas por los y las ponentes, así como con las intervenciones del público, a las correspondientes administraciones para su puesta en práctica mediante legislación y proceso de plan de re vertebración del territorio. 

A continuación Patxi Uriz, (Puente de la Reina, Navarra) ganador del Premio Goya a mejor corto documental con Hijos de la Tierra en 2016 presentó y proyectó “Los últimos de la Mejana. Rebeldía y Esperanza”, pieza sobre los últimos hortelanos de Tudela, Navarra, y la importancia de mantener el cultivo tradicional de la tierra, de la que apenas queda rastro. También se presentó la exposición fotográfica Carizias de Radiz, de Katerina Buil (Barbastro) y el mural anual conmemorativo del festival, realizado por Anna Repullo Vique (Mercadal, Menorca). 

Tras los actos matinales, el ambiente festivo inundó las calles del pueblo de Allepuz con la actuación de “Circo Jotero” (Cía Monopájaroverde, Riglos) con la que se llenó el patio de las escuelas de risas de pequeños y mayores, seguido del pasacalles animado por la Batucada de Ojos Negros y por las mujeres de Allepuz que elaboraron la decoración del festival, que mostraban orgullosas al público.  El recorrido terminó de nuevo en la plaza principal del festival, para dar paso a la comida popular, que albergó a casi 400 comensales. 

Con una breve sobremesa para comenzar de forma puntual los conciertos, a las 17.10 abrieron el escenario los Ases del Jiloca, agrupación de Luco de Jiloca traída al festival por petición popular de los vecinos de Allepuz. Música tex mex con toques de humor, en una actuación que ya dejaba entrever el buen ambiente que se respiraba en la jornada. 

Entre Ases y el siguiente grupo, la Muixeranga dels Ports, procedentes de varias localidades de la comarca castellonense que les da nombre,  sorprendió al público con una entrada a la plaza desde el otro extremo de la calle que conduce a ella con una formación de torres  humanas y música folk tradicional. El emotivo impasse entre concierto y concierto, dio lugar a la banda valenciana Nativa. Un directo impecable, con un show enérgico que encandiló a todo el público, dejándolo, en particular a los vecinos del pueblo, “enamorados” de la banda. 

El punk tomó protagonismo tras Nativa. El grupo de la Ribagorza, Au D´astí, subió con garra al escenario, dando lugar al momento más “gamberro” del festival, destacando de la actuación también la calidad musical del grupo y su compromiso con la problemática de la despoblación y el mundo rural con sus letras, algunas de ellas cantadas en aragonés. 

 A las 00.15, el cabeza de cartel principal del festival, Mafalda (Valencia), arrancó su potente directo con “Las que Faltaron”, uno de los temas más aclamados de la banda. Casi una hora y media de concierto con un público entregadísimo y un grupo y equipo técnico que ofrecieron un espectáculo musical y de luces espectacular, que terminó con la canción “X”, en la que la banda invitó a subir a media docena de niños y niñas que llevaban el maquillaje habitual de la banda y camisetas dibujadas por ellos y ellas mismas con los integrantes del grupo. Un momento muy especial en el que se puso el foco en la importancia de la infancia en el mundo rural. 

Con Mafalda, el festival consigue por cuarto año traer a un grupo de éxito nacional por primera vez a la provincia de Teruel, marcando un hito la organización en su empeño y cometido por movilizar el mundo rural a través de la cultura, ofreciendo a la gente de la provincia disfrutar de sus artistas favoritos en su propio territorio. 

La fiesta continuó hasta las 6 de la mañana, con un fenomenal y festivo ambiente todavía, a cargo de la divertida y variada sesión del colectivo Dj Sororitrap Sound Antysistem (Zaragoza). 

Unas horas después, una decena de personas salía desde la plaza del pueblo, ya vacía tras la intensa jornada anterior, para realizar la Andada Popular, que tuvo lugar por las inmediaciones del río Alfambra, incluyendo el término municipal de otra pequeña localidad vecina, Jorcas. 

Tras el éxito de este 2023 la continuidad del festival está asegurada mediante la sexta edición, en la que la organización, Asociación Escurzón de Allepuz, ya mismo está trabajando.