Cantavieja ha iniciado esta semana las obras de la calle Calasanz Rabaza, el último tramo del casco histórico del municipio que falta por arreglar.
Las obras empezaron el pasado lunes y consisten en la reparación integral de la calle, realizando un “cambio de desagües y canalizaciones subterráneas para después pavimentarla con un nuevo empedrado como el del resto del centro de Cantavieja”, según explica el alcalde, Ricardo Altabás.
Esta actuación se hará en dos fases y esta primera se ha presupuestado con 47.135€, financiados en un 80% por el Plan de Inversiones Financieramente Sostenibles para 2020 de la Diputación Provincial de Teruel. El resto del importe será financiado con fondos propios del Ayuntamiento de Cantavieja.
Se estima que las obras se alarguen alrededor de tres meses y finalicen durante el mes de septiembre. Con esta actuación se dará por completado el circuito de todo el casco histórico de Cantavieja.
